domingo, 10 de junio de 2012

El tema es que podría uno y según desde donde se lo mire seguir escribiendo eternamente, no me refiero a eternamente de veras, que eso sería un despropósito, una licencia de la imaginación que aquí no toleraremos, pero claro que no.

En fin, decíamos que podríamos, claro que sí, se podría escribir eternamente, largo y tendido, podría escribirse durante largo rato, digamos, por ser civilizados y conciliadores, podríamos largo rato estar tecleando, estar paveando sobre la superficie del lenguaje, sí, y eso sería acaso recreativo, acaso necesario, sostenerse en el Tiempo por medio de la palabra.

gran cosa! y qué con eso?

tal vez la Libertad, ni más ni menos.

Ella misma, la sensual, la inmensa.

Un día la conocí y cada tanto entonces me visita, desde entonces, digo, claro, con disculpas.

Así las cosas me entretiene pensar que al escribir, al estar en esto, al sostenerse en el tiempo por medio de la forma, entonces bueno, uno puede escupir vocablos y modelar impulsos, y así durante largo rato, tendido rato, se entiende? claro que sí, pero en fin.

Cosas hay que complican a las cosas, y la primer cosacomplicadoradecosas es el jodido principio de Identidad. Viejo duro hueso de roer impracticable.

Colmillos de lo que... del fantasma que dice que yo... de ese dedo que me acota y me define... me dibuja y me borronea...

que si no, intento decir, podría ser una gran profusión, un derretimiento de Glaciares, una fiesta de... generosidad... suena soberbio, lo sé... pero vamos! que si no tuviera la maldita tendencia de mirar por sobre mi hombro para ver si sigo siendo eso que dice en alguna cédula mal impresa... entonces, digo, caramba! como sería la cosa... un vendaval, un huracán, un ventarrón...

nadie se asuste...

todo sigue en su lugar...

solo que los ojos vuelan

sudan

cambian

tiempan ( por decirlo pronto y entonces mal)

Los ojos como Cosmos... ay, los ojos...

cuando son claros me recuerdan a mi madre. Duro? pero es así... sí?

cuanta duda en el trascurso...

cuanto remo indeciso...

cuanto desvelo...

pero eso es claro, evidente... rumiar de Descartes frente a su estufita...

exhibiciones impúdicas...

A fin de cuentas se trata de hacer como Orfeo y seguir adelante, en la loca presunción de que nos siguen, de que leen nuestro Blog, de que esta misma oración es acompañada fielmente, devotamente por imaginadas miradas cual Eurídices, por retinas amantes, por almas si se quiere fulgurantes en la oscuridad del Infierno...

se trata quizá de cantar y de no oír el arrullo del propio canto... de respirar y seguir emitiendo las notas... de anhelar y confiar y de no mirar por sobre nuestro hombro...

están ahí?

...


3 comentarios: